5 años.

En realidad son 13 los años que conozco a la mujer que hoy es mi esposa.

Primero, como compañera de la universidad, luego como compañera sentimental, y ahora como compañera de vida.

Hace 13 años, nadie habría creído que terminariamos juntos, como esposos y con hijos. En ése entonces, mi plan de vida marcaba al horizonte, no tenía un sentido común a seguir, la brújula de mi vida parecía más ventilador que otra cosa. Lo único que me importaba era terminar la universidad para largarme a caminar, a conocer.

Estaba tan convencido de éso, que se lo hice saber a mi madre, entonces ella solía decirme: "Eric, cuando platico con mis amigas y comenzamos a platicar de los estudios de nuestros hijos, pues todas me dicen ésto y aquello. Cuando me preguntan de ustedes solo digo Alfredo (mi hermano) estudia administración de empresas. Y Eric... mmm.. bueno, él está estudiando para vagabundo!".

Ella siempre ha sido alguien que marca mis defectos, todos ellos. Le he dicho que es mi más dura crítica, pero pasa algo extraño, ella siempre me ha cuidado a pesar de todo.

Cuando novios, solo terminamos una vez, por muy poco tiempo, cuando volvimos fue para no separarnos nunca.

Hemos vivido muchas cosas desde entonces, como todo, cosas buenas y malas, pero lo importante es que las hemos vivido siempre juntos. Yo le he dicho que es mi único apoyo.

Nuestros amigos en común, los que nos conocen desde siempre, nos han dicho que jamás habrían creído que nos casariamos. Ésto por la diferencia tan radical en cuanto a personalidad, gustos, no sé, ésa diferencia viene a ser muy notoria hoy en día. Y con todo ésto, pues lo único que concluyo es que la vida es algo caprichosa, que me ha puesto a una buena mujer en el camino.

Aún recuerdo cuando nos casamos, en el altar me preguntó si estaba nervioso, a lo que contesté que sí, ya que nunca me había casado!.

Otra cosa que recuerdo, cuando platicando con un amigo, le comenté el hecho de sentir cierta rareza al compartir la cama. Él me dijo, Eric ahora quizá no puedas dormir con ella, pero después no podrás dormir sin ella.

Aún recuerdo éso, y pienso en cuánta razón tenía.

Han sido 5 años de matrimonio, con sus altibajos, hemos pasado por tantas cosas, la enfermedad que la dejó flaquitita y que aún no termina por vencer, dos hijos al año de casados, y sin la experiencia de saber cambiar un pañal; los contrastes económicos, las desveladas, las desmañanadas, los enojos, las reconciliaciones, las preocupaciones, las emociones, las alegrías, las lágrimas. Hemos compartido, y quiero seguir haciéndolo, ella es una buena mujer.

No soy del tipo romántico, no soy del tipo detallista con florecitas y todo éso que a las mujeres les gusta. Me he preocupado más por ser un gran apoyo, por alagarle el espiritú, por hacerle la vida mas felíz de lo que sola podría llegar a ser.

Hoy en día, mi pasado no le afecta, mi presente le preocupa y mi futuro lo comparte. Ella es Xóchitl, la primer flor de mi jardín.

Hoy quiero agradecerle 5 años de compañía desinteresada, de paciencia infinita, de valor constante, de amor incondicional. Hoy quiero agradecerle que hace 5 años, quiso unir su vida con la de éste, un simple habitante más de éste mundo (y ya nada de echarse pa´tras!).

¿Que si la amo? ... hasta el final de mis dias!.

Bueno, en realidad hicimos 5 años el 19 de julio, pero fué hasta ahora que pude escribir (es que la emoción no me dejaba).

Gracias por a pasar a perder el tiempo en éste blog.

Ésta rola me gusta.

Ésta se la di cuando nos casamos.

Y ésta le gusta, y el dia que nos casamos se la cantaron.

Eric