Gracias má por ser como eres.
Quizá no leas ésto, pero me basta con que sepan que te quiero un chingo, y que mi vida no es suficiente para agradecer todo lo que has hecho por mí.
Gracias por preocuparte y querer lo mejor para mi vida, aunque a veces no lo veo de la misma manera como tú lo haces.
Gracias por enseñarme a sobrevivir en éste mundo.
Gracias por intentar entenderme, porque sabes que mis locuras, seguramente pasaron por tu cabeza!
Gracias por enseñarme que la lealtad y la solidaridad son dos cosas, entre muchas otras, que le dan valor a la vida.
Gracias por respetar las desiciones que en mi vida he tomado, aunque algunas de ellas no terminen de convencer.
Gracias por querer a mis hijos, y verlos como si fueran tuyos. Por defenderlos incluso de mí, ya que sabes que son ramas del árbol que tú representas en mi vida.
Y quiero que sepas que siempre que me he sentido solo, al saberte viva, me siento mejor.
Por éso hoy má, iremos a comer, y echarnos una chela, y platicaremos. Porque cuando partas, o lo haga yo, quiero que recordemos que nos quisimos un chingo. De éso ni duda cabrá.
Ah! y además hoy me saldré temprano del trabajo, porque aunque ellos no tengan, yo sí tengo madre!!!
Salú pués.
3 comentarios:
saludos.
que tan alejado te queda la ciudad de mexico?
VOy pronto..DIgo.
el mes que viene
Saludos Eric,
Me gusta mucho lo que dijiste sobre tu mamá. La vida es corta y demasiado pronto nuestros padres nos van a dejar solos. Hay que aprovechar el momento cuando todavía estén con nosotros.
Felicidades.
Yo ya no tengo madre.
Lorena
Gracias, Eric, también te he leído. Tus hijos son lindos. Me voy para tu tierra. En junio estaré en San Miguel de Allende, Guanajuato.
Muchos saludos, amigo.
Lorena
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